
5. Ondas de calor marinas
Alejandro Ramos-Rodríguez
jaramos@cicese.mx
Resumen | Este artículo describe la cantidad de días registrados con ondas de calor por categoría
para el mes de octubre de 2025, acorde a la clasificación propuesta por Hobday et al. (2018). Durante
octubre, a lo largo de la costa del Pacífico en la península de Baja California Sur, se observó una
ausencia de ondas de calor. La mayor cantidad de días con ondas de calor marino se registraron dentro
del Golfo de California, en particular la porción aledaña a Santa Rosalía, y Bahía de La Paz. Aunque
también se observan en la porción sur de Sinaloa y la costa de Nayarit. Para las tres regiones
consideradas a detalle, la cantidad de días de onda de calor fue mayor para la Bahía de la Paz (12 a 24
días de ondas de calor marinas), seguida de Cabo Pulmo (2 a 12 días) y San Juanico (sin días de ondas
de calor en la región costera).
Introducción
Se ha comenzado a comprender las consecuencias e impactos del cambio climático
antropogénico a largo plazo. Sin embargo, los eventos discretos, como ciclones, huracanes y
ondas de calor también afectan significativamente ambientes regionales y a especies
animales, incluyendo a las poblaciones humanas. De hecho, se prevé que el cambio
climático intensifique dichos eventos, exacerbando sus consecuencias. Dichos eventos
también ocurren en el océano, y en décadas recientes se han registrado eventos de aguas
anómalamente cálidas, que pueden durar meses y extenderse por miles de kilómetros
cuadrados, recibiendo el nombre de ondas de calor marinas (Hobday et al., 2018;
McGregor, 2024).
Las ondas de calor marinas son un fenómeno que está cobrando cada vez mayor relevancia,
dado que están teniendo impactos de largo plazo en los ecosistemas, con consecuencias
económicas subsecuentes. Se ha registrado que de 1925 a 2016, la frecuencia de ondas de
calor marinas tuvo un incremento del 34% en la frecuencia y del 17% en duración.
Resultando en un incremento del 54% en días de ondas de calor marinas globalmente
(Oliver et al., 2018). Los efectos producidos por las ondas de calor marinas dependen de la
intensidad y la duración de estas. Pero, por ejemplo, la onda de calor conocida como Warm
Blob, acaecida en 2013-2015, produjo a lo largo de la costa de Norteamérica occidental,
cambios de distribución de especies como atún, cangrejos o copépodos; cierre de pesquerías
comercialmente importantes y mortalidades masivas de mamíferos y aves marinas. Ello ha
dejado gran incertidumbre respecto a cambios físicos y ecológicos en comunidades y
ecosistemas (Cavole et al., 2016). Asimismo, estudios recientes empiezan a mostrar que las
ondas de calor, no solo repercuten en la parte marina, sino que comienzan a alterar la salud